Pedido de respeto por los derechos de los niños niños, niñas y adolescentes en los medios

Frente al trato que reciben los niños, niñas y adolescentes en los medios de comunicación, las organizaciones de la sociedad civil que conforman la causa #InfanciaEnDeuda advierten que “las niñas, niños y adolescentes son sujetos de derecho y, en consecuencia, no pueden ser lesionados en su dignidad o reputación” y sostienen que “por su rol social, los medios deben poner especial atención en respetar y difundir esos derechos”.
Someter a niñas, niños y adolescentes a situaciones donde son menospreciados o ridiculizados es una violación a la Declaración de los Derechos del Niño y a diversas leyes nacionales, entre ellas la Ley de protección integral de los derechos de las niñas, niños y Adolescentes (26.061). La normativa nacional sostiene en su artículo 9: “Las niñas, niños y adolescentes tienen derecho a la dignidad como sujetos de derechos y de personas en desarrollo; a no ser sometidos a trato violento, discriminatorio, vejatorio, humillante, intimidatorio; a no ser sometidos a ninguna forma de explotación económica, torturas, abusos o negligencias, explotación sexual, secuestros o tráfico para cualquier fin o en cualquier forma o condición cruel o degradante”.
Es constante la exposición en los medios de comunicación de las niñas, niños y adolescentes en formas inadecuadas, donde son rebajados o maltratados o utilizados como objetos de consumo. De esa forma, los medios de comunicación mantienen y reafirman una visión de la infancia que los somete a actos vejatorios. La legitimación de un modelo violento para con los chicos y chicas desde los medios constituye un acto sumamente negativo para la infancia y la adolescencia.
Desde #InfanciaEnDeuda remarcan la importancia de que los medios se atengan a la legislación vinculada a la niñez y adolescencia, para fortalecer la posición de este sector vulnerable, como sujeto portador de derechos, y exigen al Estado que enfatice su accionar sobre la exigencia en el cumplimiento de la leyes de control, a fin de que se asegure el efectivo goce de los derechos y garantías reconocidos en la Constitución Nacional, la Convención sobre los Derechos del Niño y demás tratados de derechos humanos ratificados por el Estado argentino.